martes, 20 de abril de 2021

Reflexión final

 Queridos bloglectores:

Ha llegado el momento de la reflexión final. Debemos entender este ejercicio como un momento de crecimiento y aprendizaje, ya que en él podemos identificar aciertos y equívocos.

Primeramente, debemos pensar en nuestros entornos de aprendizaje. Sabemos que contamos con mucha información a nuestro alcance y, muchas veces, pensamos que es posible llevarlo todo al aula, pero… nada más lejos de la realidad. En esta asignatura he aprendido que debemos seleccionar cuidadosamente los recursos para garantizar que se ajustan a las necesidades de nuestros estudiantes, que podemos aprender de diferentes fuentes dentro y fuera del aula y que todo va más allá de una titulación.

Asimismo, considero que la formación ha de ser continua, variada y recíproca. Las RRSS y las nuevas tecnologías han abierto todo un abanico de posibilidades para cursos de formación de iniciación y profundización para el docente de ELE, además, los eventos académicos presenciales y online favorecen y promueven la interacción y el intercambio de recursos. Por ello, aprovechemos todos los recursos y herramientas digitales como, por ejemplo, los canales de Youtube y páginas de web gestionadas por colegas creativos y maravillosos.

Finalmente, me gustaría detenerme en los entornos digitales de aprendizaje. No debemos entenderlos como un espacio frío en el que solo importa comprobar si mis interlocutores me escuchan. Por el contrario, ha de ser un espacio vivo, eficiente, interactivo, divertido, motivador y, sobre todo, de aprendizaje y crecimiento. Para ello, debemos incluir recursos y estrategias lingüísticas y paralingüísticas que hagan de la clase un momento único y significativo.

Para terminar, me gustaría compartir mi reflexión en vídeo sobre mi PLE y la asignatura. Creo que ha sido una experiencia muy enriquecedora y útil. Mi mochila docente se va cargada de recursos, herramientas y experiencias que intentaré llevar a mi aula.

¡Mil gracias, Lola y compañeros, por hacer de esta asignatura una gran experiencia!

Cristina




Bibliografía:

Castañeda, L. y Adell, J. (2001): «El desarrollo profesional de los docentes en entornos personales de aprendizaje (PLE)» en Roig Vila, R. y Laneve, C.(Eds) La práctica educativa en la Sociedad de la Información: Innovación a través de la investigación/ La practica educativa nella societa dell´informazione: L´innovazione attraverso la ricerca. Alcoy: Marfil: 83-95


lunes, 19 de abril de 2021

La interculturalidad y la gestión del espacio en el aula de ELE

 Queridos bloglectores:

¿Cómo crees que influye la competencia intercultural en la proxemia en el aula? ¿Cómo gestionas tu interculturalidad?

 


En esta tercera publicación me gustaría reflexionar sobre un tema que muchas veces se concibe como complementario y sin mayor relevancia, pero que en mi opinión requiere de mucha atención: la gestión del espacio en el aula.

Cuando trabajamos la gestión del aula de ELE (UD 3) pensamos en todos los factores que inciden y personalizan nuestra praxis docente. No obstante, me gustaría destacar algunos aspectos que considero importantes desde un punto de vista intercultural, además, los ilustraré con mi experiencia con estudiantes de diferentes nacionalidades.

En primer lugar, creo que la disposición de las mesas o pupitres puede darte mucha información sobre el grupo. Por ejemplo, en mi aula tenemos sillas de pala y unas mesas al fondo para otras actividades. Un día mis estudiantes chinas “descubrieron” cómo era una clase compartiendo una gran mesa y no quisieron volver a las sillas. Por lo visto, la cercanía les permitía ayudarse e intercambiar dudas (propio de la cultura confuciana). Después de ver los resultados, la mesa pasó a ser el lugar habitual y las sillas, las alternativas para actividades.

Por otro lado, considero que el espacio vital, el contacto físico y visual son aspectos a considerarse cuando se construye el perfil del grupo. Por ello, debemos empezar por observar cómo interactúan entre ellos, qué tipo de contacto se da, etc. Esta información será valiosa incluso para el diseño de actividades. Recuerdo, por ejemplo, a estudiantes musulmanes de Asia Central que evitaban cualquier contacto físico con el sexo opuesto (los chicos preferían trabajar en grupo sin chicas y viceversa). Sin embargo, después de un año de curso de lengua y cultura españolas pudimos despedirnos con un fuerte abrazo. Con esto quiero decir que es un proceso progresivo que lleva su tiempo, que no se puede forzar.

En conclusión, la gestión del aula implica varios factores, todos son importantes y debemos ser observadores y cuidadosos para que no afecte la dinámica de la clase y, sobre todo, para que nuestros estudiantes se sientan cómodos y respetados culturalmente.

¿Has tenido alguna experiencia intercultural similar que condicione la gestión del espacio en tu aula? 

Venga ¡anímate!



Bibliografía:

Hall, E. T. (1959). The silent language. Nueva York. Doubleday & Company ed.

DrDeborahSwallow (2012, febrero 20). Intercultural Communication Adventure with Little Pilot. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=PSt_op3fQck&t=98s

Poyatos, F. (1994). La comunicación no verbal I y II. Madrid, Istmo

 

domingo, 21 de marzo de 2021

¿Qué tan inteligentes somos?

Hola, bloglectores:

Hablar de inteligencia supone enfrentarse a muchos conceptos y teorías, sin embargo, en esta ocasión nos concentraremos en la inteligencia como recurso de enseñanza/aprendizaje en el aula de ELE. Para ello, vamos a partir de lo propuesto en la UD2 (2.3.6.), es decir, en la Teoría de las Inteligencias múltiples propuesta por Gadner (1996) y adaptada al aula por Alonso (2016).

Muchas veces hemos pensado que no somos lo suficientemente `inteligentes´ como para realizar algunas tareas. Asimismo, nuestros estudiantes pueden sentir que “no se les da bien” aprender español, ya que supone cierta dificultad (¡sobre todo el primer día que explicamos la conjugación del presente irregular!). No obstante, tal vez la solución no esté en pensar en esa única opción porque, como sostienen los autores antes mencionado, contamos con ocho tipos de inteligencias: lógico-matemática, visual-espacial, corporal-cinestética, musical, verbal-lingüística, espiritual o existencial, intrapersonal o intuitiva e interpersonal o social. Cada una de ellas resalta aquellos factores y aspectos en lo que nos destacamos. Es decir, si algo no se nos da bien no significa que no seamos inteligentes, sino que ese tipo de inteligencia está poco desarrollada en comparación con otras.

Ahora bien, ¿cómo nos ayuda esta teoría en nuestro rol docente? Pues, creo que es un recurso valioso que nos ayudará a entender las fortalezas y debilidades de nuestros estudiantes. Asimismo, es un instrumento necesario para el diseño del material de aprendizaje adaptado a las necesidades de nuestro grupo. Recordemos que no solo cuentan los contenidos, sino cómo lo transmitimos a nuestros estudiantes.

Para ampliar esta teoría, les presento un vídeo que explica e ilustra cada una de las inteligencias propuestas por Gadner. ¿Te animas a identificar qué tipo de inteligencia predomina en ti? Después de visionar el vídeo, te invito a que compartas en los comentarios qué tipos de inteligencias tienes… ¡Te esperamos!



Bibliografía:

Alonso, E. et. al. (2016). Soy profesor/a. Aprender a enseñar. La diversidad en el aula. Madrid, Edelsa.

Gardner, H. (1996). Las inteligencias múltiples. Retz, París.

Recursos Aula (2020, abril 11). Las inteligencias múltiples. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=EzDrymvpt1w


jueves, 11 de marzo de 2021

¡Aquí vamos!

 Queridos bloglectores:

En esta primera entrega me gustaría que reflexionáramos sobre cómo un profesor de ELE ha de ser una profesional humanista (UD1 2.3.2).

Incluyo como muestra de aprendizaje la siguiente característica: el profesor de español es un profesional. A través de una acertada selección de cualidades propuesta por Cerrolaza y LLovet (2002) he aprendido que como docente debemos estar abierto al cambio porque nuestra aula es una microsociedad en la que debemos interactuar con optimismo y, siempre, reconociendo a nuestros estudiantes como seres integrales de los que también podemos aprender. Estas características resumen lo que más me gusta de ser una profesora de ELE, por tanto, intento que estén presentes tanto en mi formación como en el desempeño profesional.

Me gustaría incluir estas afirmaciones en mi aula mediante la creación de espacios de reflexión. Se podrían diseñar actividades, que fomenten la interacción con los estudiantes, en las que podamos recibir información valiosa que favorezca el aprendizaje centrado en el alumno. Incluso podría profundizarse mediante el intercambio de experiencias, impresiones y recursos entre colegas en espacios concebidos para mejorar (¿y por qué no? disfrutar) de la praxis docente.

En resumen, para ofrecer a nuestros estudiantes un ambiente idóneo para el aprendizaje debemos empezar por nosotros mismos y, para ello, tenemos que reflexionar continuamente sobre cómo dar lo mejor como profesionales y, por supuesto, como personas.

Para terminar esta primera reflexión, te animo a visionar el siguiente vídeo y a que compartas ¿qué es lo que más te gusta de ser profesor de ELE? ¡Venga! ¡Anímate y deja tu comentario! ¡Hasta la próxima!

 



Bibliografía:

Cerrolaza, M. y Llovet B. (2002). «Una visión humanista del aprendizaje/enseñanza de E/LE: valores y principios metodológicos» en Colección Expolingua, Cuadernos de Tiempo libre. Fundación Actilibre.

Profesores de ELE. (2015, febrero 6). Lo mejor de ser profesor de español. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=rAI6LcAUPEs&t=6s

Reflexión final

 Queridos bloglectores: Ha llegado el momento de la reflexión final. Debemos entender este ejercicio como un momento de crecimiento y apre...